jueves, 25 de septiembre de 2014



             COMPLETAMENTE DESHECHAS

Yo deshice como una nube tus rebeliones,y como niebla tus pecados;vuélvete a mí,porque yo te redimí. 
Isaías 44:22


A los 17 años Juan Newton se enroló en la marina británica.Vivió la vida típica de un marinero joven y alocado.No sólo era inmoral,sino que continuamente se andaba metiendo en dificultades.Una vez fue azotado en público por querer desertar.
Más tarde llegó a ser cápitan de un barco,y se dedico a la compra y venta de esclavos.Una noche,en medio de una terrible tempestad,al parecer muy cerca de la muerte,oró por primera vez desde hacía mucho tiempo.
Prometió entonces dejar el comercio de esclavos y dedicar su vida a Cristo.Fue librado de la muerte en esa ocasión.Después estudio teología y fue ordenado en 1764.
La conversión y experiencia de Newton fueron tan dramáticas,y su predicación tan elocuente,que multitudes se reunían para escuchar sus dinámicos testimonios.Compuso 281 himnos,por lo que llegó a ser muy conocido.Uno de ellos expresa de manera especial el profundo dolor que le causaron los pecados que había cometido,y la felicidad que experimentó cuando Cristo lo libró de su culpa mediante su gracia.


              Sublime gracia del Señor;
              yo era malvado y me salvó.
              Estaba ciego y ahora veo.
              Perdido estaba y él me halló.
              La gracia puso en mí,temor,
              y a mis temores puso fin.
              !Oh cuán hermosa pareció
              desde que yo la conocí!
              De muchas pruebas me libró;
              Siempre he salido vencedor.
              Si me ha guiado hasta aquí,
              también me llevará al Señor.

Querido amigo/a: Jesús está dispuesto a darnos su amor infinito a ti y a mí.





      











         

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