Navidad = Jesús en el Corazón

Algunas de las palabras más conocidas y felices de la navidad son éstas: “Porque os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor”.

Así es, esta fue la mejor noticia que pudo haber en la tierra, la llegada del Salvador del mundo a este planeta; el que haya nacido allá por el mes de abril, diciembre o en cualquier otro mes del año, no trasciende en nada el grande valor y el privilegio que tuvo toda la humanidad con el nacimiento de Jesús; porque ese niño, que nació en uno de los lugares menos esperados, se tornaría en el hombre más grande del universo, viviría una vida intachable y nos ofrecería salvación.

Si alguien me preguntase un sinónimo de Navidad, yo diría: JESÚS EN EL CORAZÓN. Y es esa la verdadera Navidad, si está Jesús en nuestro corazón nuestros actos serán de bondad, generosidad, respeto, comprensión, humildad y mucho amor, es sencillo entender esto. Es solo permitir que el Salvador haga pose en nuestra vida y la misma tendrá sentido, de forma automática se obrarán cambios, nuestras palabras serán dulces y agradables, y nuestras obras definirán quién habita dentro de nosotros.

No está mal el árbol, los regalos, los villancicos, la comida; lo que estaría mal, es que eso ocupe el primer lugar, olvidándonos de lo más importante, Cristo Jesús. Si tenemos la opotunidad y los medios de intercambiar algún regalo, servirnos una cena deliciosa, disfrutar de la compañía de la familia, disfrutemos ese momento, teniendo el espíritu y la fe viva en el Salvador. Que ese mismo Jesús que vino a este mundo como un bebé, podamos aceptarlo en nuestro corazón a partir de hoy y que permitamos que el gobierne nuestro ser siempre.

Este es mi sincero deseo para todos mis amigos,

Feliz Navidad..!!

Italo